No sé si es la pandemia o siempre pasa esto cuando te aproximas a los 30, quizá es una mezcla de los dos: pasar el último año de mis 20s encerrada. Aunque a final de cuentas los números son constructos, les damos significados ¿no? Pero he andado terriblemente nostálgica y reflectiva.
Es como si antes siempre hubiera estado viviendo en el presente, con un pasado chiquito para tener de qué platicar y ya. Cuando estaba en la prepa realmente qué recuerdos tenía ¿la secundaria? Y en la carrera tenía la prepa y quizá unos semestres atrás ya que estaba avanzada. Incluso cuando recién salí de la carrera todo estaba "cerquita", hacía un par de años que había estado de intercambio, hacía un par de años que había ido a tal evento o participado en x proyecto. Ahora todo está lejos pero se sigue sintiendo fresco.
Hace más de 10 años que salí de la prepa, hace 8 que estuve de intercambio (y abrí el blog), el tiempo que he pasado viviendo en Hermosillo equivale a la primaria de un niño, todo está lejos, de todo ha pasado mucho tiempo.
Antes estaba okay con la idea de morirme, pensaba que cuando me muriera tendría todas las respuestas a todas las dudas que tuve que siempre ¿Dónde estuvo esa cosa que se me perdió?¿Qué hubiera pasado si...? También tenía una fé ciega en que todos tenemos un propósito en la vida y cuando alguien muere es que cumplió su propósito, y aunque sigo creyendo eso, este año me empecé a poner muy existencial. Si cuando muera será como antes de que naciera donde simplemente no hay nada entonces mi consciencia y todas mis ideas se perderá, y la idea de olvidarme a mí misma es lo que me tiene más aterrada, con razón los señores luego escriben libros y cosas así.
Antes tenía todo una vida por delante, estaba en un principio, ahora ya va un tercio de una vida bien vivida y de juventud no queda tanto, ahora puedo ver tanto para atrás como para adelante.
Y se siente raro...
No hay comentarios:
Publicar un comentario